El libro analiza la situación de los presos en los campos de concentración desde el punto de vista psicológico. Nadie mejor que el autor, psicólogo de profesión, para llevar a cabo este análisis teniendo en cuenta que tuvo la desgracia de pasar la Segunda Guerra Mundial recluído en un campos de concentración.
La idea del libro me gustó mucho, sin embargo una vez leído debo decir que no ha colmado mis expectativas. Quizás sea porque esperaba encontrar análisis más sorprendentes, es decir, un análisis que fuera mucho más allá de lo que un individuo normal (no psicólogo) podría decir.
Mi calificación: 6
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